martes, 28 de abril de 2009

Nos vamos a Fuente Alamo




El próximo sábado participaremos en uno de los triatlones de corta distancia más carismáticos de España. Gran ambiente, inscripción la más barata, pabellón municipal para dormir, entrega premios rollo Holliwood, copas y comidas gratis y siempre algún pro invitado. Una bici medio durilla. Estrellas invitadas: 6 gladiadores y Javi Raboso.


Richard Calle-El Superchispita


El gladiador que le aguantó la rueda a Iván Raña, en elite, campeonato de España. Se está quedando sin sitio para guardar las trofeos en su casa. Siempre tiene una sonrisa y un saludo para todo el mundo. Irradia energía positiva. Es capaz de sonreirte mientras esta disputando el podio a 190 pulsaciones. Hay dos cosas que le encantan a Richard: sacar el corazón por delante del acople y los tigretones.












Alberto Gómez-El Elegante


Da igual la disciplina siempre destaca por su elegancia. Un nado de los más refinados que he visto, una bici muy suya con las manetas bien levantad
as y una carrera también muy elegante, con el tronco totalmente vertical y con la mirada al frente, como si fuera un modelo de Hugo Boss.














Oscar Lunar-Mi Discípulo



Es el típico discípulo que sabe escuchar muy bien y sacar lo mejor de su maestro y que siempre acaba superándolo o triturándolo. Pero por el momento en corta distancia. En larga lo tendrá más difícil, la edad es un grado, lo celebros de cemento porla son los que te permiten pasar de la felicidad a la miseria y de ahí a la felicidad.








Hector Lunar-El Gladiador en Esencia



Ha ido compitiendo los últimos años siguiendo los pasos y el ritmo fuerte de su querido maestro y hermano casi a trompicones. Aun teniendo poca base siempre estaba delante, ya que es un luchador nato. Pero desde que entró a formar parte de los gladiadores todo cambió. No hace ruido y entrena más que nadie. Sale a las batallas de forma tímida, pero, cuando entra en calor, es como Tomas Muster, arrasa.








Javier Raboso-Il Superdoctore

Valiente. Aun no ha participado en
un olímpico y se lanza a la aventura de un medio ironman.
Progresando a un ritmo importante. Nos conocemos desde la infancia. Vivía en el mismo barrio que yo en Barcelona, en la misma urbanización en Castelldefels y trabajamos juntos unos años en la empr
esa privada. Somos de la misma edad. Lo conozco tanto que se como recuperara y a cuantas pulsaciones va en cada una de las disciplinas del triatlón mirándole a la cara.

Comete los mismos fallos que yo, es irregular, tiene también las piernecitas de keniata, biotipo Go Up, etc, etc... Creo que en poco tiempo me pillará y entonces disfrutaremos aun más los dos. Siempre apura a unos limites muy cercanos al precipicio: a día de
hoy no tiene neopreno para Fuente Alamo y se compró la bici de carretera el mes de Marzo cuando el half Ironman es en Mayo. La aventura forma parte de su cotidaniedad, es por ello que creo que migrará hacia alguna disciplina con un componente de extremo riesgo. ¿Tri Go Up Ultrafondo?






Alex Zanui-El Productivo



El que menos entrena del Prat Triatlo, 3 días a la semana, y el que más rendimiento saca por hora entrenada. En una ocasión lo he visto llegar a una competición habiendo dormido tres horas, pedirme un gel, ya que no había desayunado y hacer un top 20. Siempre te sorprende. No he visto a nadie, al salir del agua, hacer una remontada tan espectacular como al Productivo Alex. Es realmente emocionante verlo.

domingo, 26 de abril de 2009

Tres Naciones


Esta es una de las rutas clásicas de cicloturismo en Cataluña. Ricardo Lazarte me la recomendó y había leído una crónica sobre ella en el blog de Javi Maya. La ruta auténtica parte de Puigcerda, España, y da la vuelta a las tres naciones: España, Andorra, Francia.

Yo decidí hacerla en sentido contrario: Francia, Andorra, España. Me apetecía mucho hacer de madrugada y con frio el tramo Go Up que va desde Porte-Puymorens, Francia, a 1630m hasta el Port D´Envalira, Andorra, a 2408.

Salgo de Porté a las 7:10. A los 100 metros la primera sorpresa: unos 50 Muflones en medio de la carretera y en la montaña. Me viene a la mente el título del blog de los hermanos Teres: Un mundo por Vivir. Llego al Coll de Puymorens a 1915m, bastante entero, he entrado en calor.


Al llegar al Pas de la Casa, Andorra, el termómetro marca 0 grados, estoy a 2050m. Me paro en un bar y me tomo una Coca Cola, quiero subir hasta el Port D´Envalira y necesito buena gasolina. En dos tramos me pongo a 180 pulsaciones. Pienso: tranquilo Luis que aun te quedan 100km y hay que reservarse un poco.

Llego al Port D´Envalira, 2408m ,más cómodo de lo que me esperaba. Todo esta en la mente. Si piensas en todo el trayecto que es duro, es duro, es duro, no te darás cuenta y habrás conseguido tu objetivo facilmente. En Port D´Envalira hace mucho frio, -2º. Me abrigo muy bien ya que tengo unos 35 km de bajada y la
s temperaturas oscilaran entre los -2º y los 7 al llegar a Andorra la Vella.

Como me gusta bajar. Es la otra cara de la moneda del Go Up. Paso la frontera de Andorra con España y sin darme cuenta estoy en la Seu d´Urgell.




El letrero marca 47 km hasta Puigcerda. Estoy a mitad de camino. Es un trayecto muy bonito ya que vas atravesando diferentes pueblos pero demasiado llano para mi. Intento buscar el lado positivo. Voy a acoplarme un par de horitas. Noto que al llevar la tija de carretera en lugar de la de contra reloj, mi posición es más lejana a los acoples. Son casi tres cm. Las piernas no van tan frescas como en posición contra reloj.

Tengo que darme prisa ya que he quedado con mi familia en Porte a las 14:00. como muy tarde, ya que mi mujer tiene que estar en un congreso en Andorra un poco más tarde. Voy comiendo y pedaleando a un ritmo medio de entre 150 y 165 pulsaciones. Creo que es un buen ritmo para el Half Challenge. Llego a la gasolinera de Puigcerda cercana a la frontera con Francia.





Me noto cansado. Aun faltan más de 20km, todos de subida, aunque no tan intensos como los del principio. Me tomo la segunda Coca Cola y un gel de manzana con cafeina. Llamo desde una cabina a mi mujer y le comento que llegare a la hora y que me esperen. Llego a Porte entero pensando que he realizado una ruta muy bonita, con 160 pulsaciones, recuperando el primer minuto a 126 y el segundo a 114.

Al final 136km, en 6:45. Calorias consumidas: dos plátanos, una barrita Mule Bar, un PowerGel , dos Coca Colas, un bocata de frambuesas y 1,5l. de isotónica. Buen entreno para la Half Challenge y acumulando volumen para la Ultra Trail de Mont-Blanc. Os recomiendo esta ruta. La próxima vez la haré en sentido contrario.



sábado, 25 de abril de 2009

Porte-Puymorens


Que ganas teniamos de estar otra vez por aquí. Llevábamos desde la navidades pasadas sin venir a nuestro pueblo favorito de la Cerdanya Francesa. Hemos aprovechado que Lala tenia que hacer una presentación en un Congreso Internacional para pasar unos días en Porte.

Este pueblo de 200 habitantes es un lugar ideal para entrenar ya que estamos 1630 metros de altura. Ayer sali a correr. Desde el pueblo hasta el lago Passet. Es una ruta de un caminito precioso que se puede hacer con los esquis de fondo. Hoy una buena ruta Go Up, pero con la bici. Intentare colgar la cronica mañana.

jueves, 23 de abril de 2009

Aerodinámica y Enemigos


Ya sabéis que por mi biotipo nunca podré imprimir muchos watios en la bici llaneando y que mi medio natural son la subidas. Pero aun siendo un Vertical Triathlete ortodoxo voy a hacer una excepción en cuanto a la aerodinámica de cara a la Half Challenge.

Tranquilos, no os asustéis con la primera parte del título de esta entrada no os voy a traicionar, no renunciare a mis principios, sigo amando y disfrutando con las subidas Pero como gladiador y miembro de un club de gladiadores os hago una confesión: !no puedo permitir perder ninguna batalla!

No tenía intención de ponerme un acople de cara al Half Challenge Maresme. Pero viendo que Oscar se lo ponía y que Javier y Hector también estaban decididos he optado no solo por ponerme un acople sino por modificar la geometría de la bici.



Vosotros dais un paso estratégico en esta batalla, yo dos. Ya sabéis que los amigos una vez se da el pistoletazo de la salida se convierten en enemigos y si tiene que rodar sangre bienvenida sea.

Mi bici, la Cervelo Soloist Carbon, es bastante cara, pero si tienes en cuenta que permite tener dos bicis en una, una de carretera y otra de contra reloj, resulta económica. Es la única bici que existe en el mercado que siendo aerodinámica permite variar los grados de la geometría pasando de 73 a 76. Ello es posible gracias a una tija que permite adelantar el sillín convirtiéndola en una bici típica de contra reloj, al acercar el sillín al manillar.

Hay 6 razones por la que finalmente me pongo el acople y modifico la geometría de mi bici:

La primera, una posición contra reloj permite reducir la resistencia al aire, siempre estamos hablando de unos cuantos minutos. Existe amplia evidencia científica, según diferentes pruebas en los túneles del viento.

La segunda, según un articulo que publicó recientemente Oscar, las pulsaciones bajan de estar en una posición tradicional a una posición inclinada hacia adelante.


La tercera, tal como me ha comentado infinidad de veces mi maestro Ricardo Lazarte, una posición de contra reloj, no muy radical, bien llevada es una opción de comodidad, al poder apoyar todo el cuerpo delante y al modificar la patada.

La cuarta, para mi la más importante, se llega mucho más fresco a la parte final de la carrera. Fijaros si es cierto esto ultimo que hace poco leí unas estimaciones sobre las ganancias en la parte de la carrera a partir de una buena posición de contra reloj en la bici.

La quinta, según me comentaba Pedro de SBR de Mataró, el que me asesoró fenomenalmente con mi nueva posición, existe un factor psicológico: "si llevas esa posición se entiende que te animaras para ir más fuerte". Te crees que eres un pro y actuas como si lo fueras, aunque no sea el caso, pero estas motivado, quieres ir más a saco y acabas imprimiendo más watios. En definitiva, no vas a ir en una posición aerodinámica de paseo.

La sexta. Hoy me he desplazado hasta el trabajo con la bici. La sensación que tenía es que me pedía más y más. Impresionante. Una sencación similar a cuando me han dejado alguna vez una moto de competición y comprobaba que podía frenar más tarde al llegar a las curvas y plegar mucho más. Al estar más cerca del manillar debido al cambio de geometría, voy más acoplado y más rapido(menor resistencia al aire) y al variar el pedaleo, permite un incremento importante de la cadencia, teniendo la sencación de frescura y de poco agotamiento en las piernas. Y además, siento que voy muy


comodo. Como para devorar Km a un ritmo medio más alto de lo habitual.

¿vosotros porque lleváis acople? ¿Cual de las seis razones anteriores os parece más convincente?

PD: A partir de ahora y hasta la celebración del Half Challenge no os esperéis entradas románticas en este espacio. Este blog sera un mecanismo perfecto para ejercer presión psicológica a mis enemigos. Espero y deseo que dejen de dormir con cada nueva entrada.

jueves, 16 de abril de 2009

Recuenco´s Paseillo

Lenski: ¿damos un paseillo con las bicis?

Enzo: Síííííííííííííííííííííííí

Rafa: Podemos ir hasta el Port Ginesta, vaaaaa.

El mayor quiere guerra, mas de 15km.

Hay viento de cara.

Lenski: ponte detras mio y chupa, ya veras como no te cansas.
Mientras tanto

Enzo: Soy Enzo Ferrari, soy Enzo Ferrari

Lenski: Nooooo, que eres Enzo Recuenco.

jueves, 9 de abril de 2009

Con los pantalones de la India en Mount Rainier



Hay imagenes que jamas se olvidan.

1996.

Estaba ampliando estudios en la University of Washington, Seattle. Según muchos arquitectos uno de los mejores campus al otro lado del Atlántico y en mi opinión la ciudad más bonita de EE.UU., con un ambientazo insuperable. Muy pocos años antes que yo llegara a esta ciudad nació el movimiento Grunge(el nombre viene de mugre) teniendo la oportunidad de conocerlo y vivirlo en pleno auge.





Llevaba varios días en la universidad y no dejaba de mirar la montaña Rainier. Aunque estaba a 160 Km. del campus se podía ver perfectamente, como si se pudiera tocar. Era enorme, preciosa, atractiva y con una gran personalidad debido a su forma volcánica. De enamorarte a la primera.

Por la mañana cuando iba a clase la miraba. A media mañana, en el intermedio de clases, desde la fuente, mientras me tomaba mi bocadillo la observaba. Por la tarde, de camino hacia la residencia de estudiantes seguía mirándola. A todas horas.

La estampa de Mount Rainier desde la University of Washington es la seña de identidad o icono de esta institución. Es una imagen que de alguna manera forma parte de las vidas de todos los que han pasado por esta universidad y la guardan almacenada para siempre.



No entiendo que me esta pasando. Siento una gran atracción hacia esta hermosura de montaña. Llevo tres días en el campus y estoy decidido. En cuatro días, el fin de semana, voy a escalar Mount Rainier, la montaña más alta en el estado de Washington, 4394m.

Este Hunday azul metalizado automático que acabo de alquilar va francamente bien. Soy un poco inconsciente. Hace poco he escalado un 3.800, el Aneto. Con muy poca experiencia en montaña, solo y con unos crampones y un piolet recién estrenados y me lanzo a la aventura de escalar un 4.400. ¿Me pasará algo? Tranquilo Luis. Esa sensación, de incertidumbre, de no saber que pasará, que se repite muchas veces es en gran parte lo que motiva a la hora de plantearse este tipo desafíos. Sin un poco de riesgo, de inseguridad, no se disfruta, no hay aventura.




Ya he llegado a la entrada del Parque Natural de Mount Rainier. Viaje corto, de casi dos horas. Que maravilla de carretera. Impresionante. Los árboles a ambos lados de la vía son muy altos, parecen sequoias. Desde el asfalto veo cada vez más cerca Mount Rainier.

Aparco. Entro en la oficina del parque, llamada Paradise, para registrarme. Aquí, a diferencia del Aneto, es necesario registrarse para escalar la montaña. La chica que esta en la oficina me informa que necesito darle mi nombre y el de mis acompañantes. Le comento que voy solo. De forma rotunda afirma:

Then you cannot Go Up.

Por nada del mundo se me ocurriría subir solo intentare buscar a alguien que me acompañe.

Cannot Go Up

Por favor, déjame que te ponga un ejemplo. Se lo que es el riesgo, practico submarinismo (dejo para otra entrada mi debut en el puerto de Palamos a -25 metros con un regulador defectuoso y con el aire agotado en la bombona) y jamás bajaría solo a bucear. Sería una temeridad. De la misma forma que jamás subiría una montaña solo. ¿Crees que escalaría en solitario una montaña de 4.200 metros en su mayor parte con glaciar?

Bueno te registro provisionalmente. Con la condición de que informes sobre tu nombre y el de tus acompañantes al llegar a Muir, en el campamento base.




Son las 4 del medio día y debo de subir desde Paradise, a 1645m. hasta Muir, a 3072m. y a 6 horas pateando. Tengo que apresurarme, no puede perder más tiempo, o de lo contrario se me hará de noche antes de llegar al refugio del campamento base.


No me apetece nada dormir a mas de 3000 metros solo. Que raro, no me encuentro a nadie por el camino. Llevo una hora y me topo con el glaciar. Que frío tengo en las piernas. Soy la leche. Un globero pero de la montaña. A quien se le ocurre subir a la montaña con estos pantalones cortos (que puedes convertirlos en largos) de tela tan fina. ¡Si son los pantalones que lleve a la India! Unos pantalones de verano del Coronel Tapiocca.





Se me esta haciendo de noche. Que justo que voy. No pienso subir de noche, clavaré la tienda de campaña cuando se vaya la luz. Llevo más de seis horas subiendo, es de noche. Efectivamente no llego al refugio. Hay que tomárselo con filosofía y disfrutar, ha empezado el festival. Miro a mí alrededor, veo que en el lugar en el que estoy no hay riesgo de avalanchas de nieve y pincho la tienda de campaña en un espacio cerca de la nieve pero sin tocarla. Que ilusión voy a estrenar mi super saco de dormir de plumas The North Face, en la etiqueta marca hasta -35º. Mis piernas van a agradecer el calor.





He dormido muy bien, siete horas. ¿Que son esos gritos? Parece que están muy cerca. Desmonto la tienda de campaña y para arriba. A los trescientos metros veo a las personas que gritaban y un refugio. ¡Pero si es el campo base Muir! Que mala pata. He montado la tienda casi encima de la nieve, teniendo que dormir solo a más de 3000 metros y el campo base estaba a menos de diez minutos del lugar en el que dormí. Si es que no se puede ser más globero de la montaña.

Saludo a los señores que gritaban y hacían bromas fuera del refugio.



¿De donde sois?:

De San Francisco.

A los quince minutos les propongo subir

con ellos. Dave, un poco el líder del grupo de los tres integrantes, ex piloto de helicópteros en la Guerra de Vietnam, me comenta que están encantados. Me pregunta:

¿Llevas arnés?

No.

No problem, se lo pediremos prestado a alguien de los que vengan a dormir hoy al refugio.




6 de la tarde. Toca ir a dormir a las literas que hay que madrugar muchísimo por motivos de seguridad en la ascensión. 12 de la noche, me despierta Dave: Lui its time to Go Up. Mientras desayunamos Dave me comenta que no ha llegado nadie al refugio con un arnés para prestármelo. Pero al minuto me comenta que cree que tiene en la mochila una cinta blanca que me podría servir.


Este ex combatiente de Vietnam, se inventa espontáneamente y artesanalmente un arnés. Es muy espartano, muy fino, pero Dave cree que puede cumplir su función. Es de un material similar a la cuerdecita que se utiliza para hacer el nudo al envolver y empaquetar los dulces en las pastelerías pero un poco más grueso. Espero no tener que utilizarlo nunca.


Foto en la que se puede apreciar el arnés artesanal



Nos abrigamos, acabamos de ajustar los arneses, nos ponemos los crampones en las botas y para arriba. De 6 a 7 horas por delante para coronar Mount Rainier. El 70% de la ascensión es de noche y pisando el glaciar. Como me gusta ver esa hilera de las luces de los frontales por encima y por debajo de mí. Subimos a paso muy lento. Es un ritmo adecuado para el elevado perfil, por la existencia del glaciar y por la necesidad de ir coordinados ya que los cuatro vamos unidos por la misma cuerda.

Vuelvo a tener frío en las piernas, llevo los pantalones menos apropiados. Han pasado cinco horas desde que dejamos el campamento base. Esta amaneciendo. Dave exclama:

¡Mirar, mirar que vistas más espectaculares!



Es la imagen más bonita que jamás he divisado desde una montaña. Por un lado era de noche y por el otro estaba saliendo el sol. Y al mirar hacia abajo teníamos una manta de nubes que no nos permitía ver lo que teníamos debajo de nosotros. Espectacular


¿Qué me pasa? Me encuentro fatal. Estoy cansado. Que dolor de cabeza más intenso. Me cuesta respirar. Que sensación tan horrible, cada vez estoy más mareado. Tengo todos los síntomas del mal de altura Recuerdo el consejo del chico de la tienda que me vendió el saco de dormir: si no estas acostumbrado a subir a la montaña por encima de 3500 a 4000 metros es necesario permanecer dos noches en el campo base Muir para una correcta aclimatación a la altura.




Le comento a mis compañeros que me encuentro muy mal. Me indican que me detenga, tome un poco de azúcar y beba agua. Empiezo a vomitar. Pregunto cuanto tiempo queda para alcanzar la cima. Me responden: en torno a media hora. Sigo encontrándome mal, cada vez peor, pero les informo que tenemos que llegar como sea. Solo me queda media hora de sufrimiento intenso.

Son las siete de la mañana. Por fin alcanzamos la cima.

Una alegría muy condicionada por un gran malestar general. Mi cara lo dice todo. Dave nos informa enérgicamente, que debemos bajar ya que Lui se encuentra muy mal y en la medida en que vallamos bajando me iré recuperando.



Al cabo de una hora, sin haberme recuperado del todo y sin darnos cuenta nos encontramos en una situación de mucho riesgo en la que peligran nuestras vidas. Dave que iba primero del grupo se cae por un cortado de una gran pendiente. Al ir todos cogidos y unidos por la misma cuerda caemos detrás de el. Intentamos clav

ar los piolets en la nieve para parar nuestra caída pero estos no agarran bien. Demasiada nieve.

Estamos cayendo más de 100 metros y a unos 50 metros hay un precipicio. Los piolets no responden. Al final clavo mi piolet en la nieve, muy cerca del precipicio, agarrándolo con las dos manos, a lo Bjön Borj y, me quedo clavado. Medio segundo más tarde noto un tirón muy intenso en mi cintura, en el arnés, mi siguiente compañero se queda colgando de mi y así sucesivamente. El arnés artesanal de Dave funciona.

La zona donde lo pasamos tan mal

Que miedo hemos pasado.

Un español delgaducho como yo, con 59 Kg., salvándole la vida a unos tiarrones que han participado en la Guerra de Vietnam. Me encuentromejor. Parece que el refresh del susto ha acabado de despejarme.



Dave se me queda mirando con cara de Poker y me comenta:

Thancks Lui.

Gracias por tu arnés artesanal.

Al final llegamos al campamento base de Muir sanos y salvos. Menuda aventura.

Todo este rollo que os he explicado me sirve, además de para poder compartir y recordar con vosotros momentos inolvidables para tener muy presente que tengo que hacer los deberes. Tener en cuenta un consejo que me dio Jaume Terés. De cara a la Ultra Trail del Mont-Blanc a partir del mes de junio debo de hacer varias tiradas por encima de 2000 metros para no padecer el mal de altura.Estoy obligado a hacerlo.



Después de la mala experiencia de Mount Rainier he vuelto a vivir dos episodios de mal de altura

El primero se dió con casi tanta intensidad como el de Rainier y el segundo fue más light. Os podéis imaginar que de cara a mi participación en la Ultra Trail de Mont-Blanc lo que más respeto me da no son los 100Km. de distancia, tampoco los casi 6.000 de desnivel positivo, ni el tener que caminar de noche por encima de 2.500 metros con el riesgo asociado de la lluvia, el frío y el viento.





O tener que transportar durante todo el camino una mochila de 2,5Kg. Lo que realmente me preocupa es el mal de altura.

Pero no os penséis que voy a dejarme en casa los pantalones de la India, pienso llevármelos a Chamonix. Siempre me han dado suerte.

Una reflexión final: esta experiencia me sirve por un lado, para tomar consciencia de que hay que ser mucho más responsable con la alta montaña y por otro, tener muy presente que si intentara volver a escalar Mount Rainier hoy, me enfrentaría a ella con más experiencia y más cabeza.



sábado, 4 de abril de 2009

Pantano de Foix



Segunda vez que hacia esta ruta. Entreno muy completo con los gladiadores del club. Se trataba de ir desde casa hasta el Pantano de Foix, por las costas de Garraf. Un globero como yo, no lleva cuenta kilómetros, pero me han comentado que nos han salido más de 100 Km. y 1100 de desnivel acumulado, en cuatro horas, con una punta de 74 km/h según el cuenta Km. de Sergio.

Salida multitudinaria, éramos más de 14. Que bonitos son los colores del club. Los elite han tenido compasión de mi, aunque el ritmo ha sido intenso, más llevadero de lo que me esperaba. Me he quedado descolgado un par de ocasiones, pero luego nos hemos reagrupado, llegando a Gava-Mar bastante entero.





Enfrente de casa he coincidido con Luis Enrique. Me he acordado de la primera vez que fui al Pantano de Foix junto con el, Josef Ajram, David Soler, Imke, Guillem Lladó, Marcel Batlle y unos cuantos triatletas más. 2 años atrás, mi primera salida larga. Por entonces hacia seis meses que practicaba deporte, la bici tenía dos meses y llegue a casa fundido. Los dos primeros días casi no me podía mover y tuve un dolor en las lumbares que me duro una semana.

Soy el mismo, pero mi cuerpo se ha ido transformando estos años. Es alucinante comprobar hasta donde puede llegar el organismo.






Como diaria Jaume Teres, espero tener en el futuro suficiente salud para hacer muchas salidas como la de hoy, acompañado de mis amigos del club

Se y haz feliz. Namaste.

PD: Como se acerca la Semana Santa y vais a tener más tiempo libre os estoy preparando para la próxima entrada, una de las que me gustan, bastante larga, muy, muy Go Up. La más Go Up publicada en este espacio.